Crónica de una visita realizada el 4 de Abril del 2012.

Era nuestro primer día de vacaciones en Cantabria para un trabajador cántabro-madrileño como yo, más cántabro que madrileño. Y que ocurre en el primer día de vacaciones, pues que tienes una pereza brutal para cocinar. Cuando estaba en ese estado, he pasado al siguiente que es el del antojo; y el antojo de este día, era un arroz con almejas. Y el mejor sitio para comer un buen arroz con almejas en Cantabria, no podría ser otro que Pedreña; justo enfrente de la bahía de Santander.  Pedreña es conocido por muchos aspectos, por Severiano Ballesteros ( el quinto beatle como le denomina Michael Robinson), por su campo de golf, por sus traineras, por sus almejas y por las pedreñeras (barcazas que hacen la ruta Santander-Pedreña-somo) y que en verano llevan a los santanderinos a la espectacular playa del puntal.

Pedreña me trae muchos recuerdos de la niñez, de juegos, travesuras, las primeras noches en vela porque duermes en casa de un amigo, una persona a la que sigo estimando mucho y cuya vida es un ejemplo de continua lucha (Alberto G.C)

Nos hemos decidido por la Marina de Pedreña, situado en el puerto deportivo, entre el campo de golf y la mar, y con vistas a la bahía de Santander. Las vistas desde Pedreña y Somo de la bahía de Santander son espectaculares, para todos aquellos que os paséis por Cantabria, os recomiendo una visita a estos pueblos y que comáis  en algunos de sus bares ó restaurantes.

Poniendo foco en la comida, hemos picado de entrante unas rabas de peludin, buena ración, y muy ricas, bien fritas, con buena harina, y en aceite limpio. Tengo que preparar un post de rabas (calamares fritos en Cantabria), este aperitivo junto con un blanco de solera, ó un vermú es para los santanderinos casi una obligación.
También pedimos una ensalada mixta donde destacaba el tomate, tenía toda la pinta de ser de alguna de las huertas cántabras próximas. Que complicado es actualmente comer un buen tomate, por qué lo sencillo es complicado, por qué nos encargamos de quitar los sabores a ciertos productos.

Como ya sabíamos nos dicen que el arroz cremoso de almejas es la especialidad; arroz para dos muy muy  generoso, con unas 12 almejas de muy buen tamaño; y como no podía ser de otra forma de Pedreña, recogidas por esas mariscadoras que se dejan los riñones los días de marea baja agachándose y recogiendo almejas, y morgueras. El arroz estaba hecho con con una salsa verde donde se notaba la cebolla picada, el pimiento rojo, y el pimiento verde, a continuación había echado las almejas a última hora para no sobrepasarse con su punto de cocción.
Nos ha dado para repetir y tomar dos platos de buen tamaño, y un poquito el niño que esta vez nos acompañaba. Lo hemos regado con unas copas de albariño.

Volveremos. Se ha disfrutado de unas buenas rabas, una buena ensalada y un gran arroz con almejas en un restaurante tranquilo con muy buenas vistas; y a un buen precio (60 € todo).

Además en verano, Pedreña siempre se merece una visita con nuestro cómplice gastronómico Javier Otaduy a un asador de verano que mira a la bahía y que borda las sardinas, el bonito y las lubinas a la brasa. Nos referimos al Asador Ezquerra gestionado por Carlos y su hijo Cristian.